martes, 17 de diciembre de 2013

1 CORINTIOS 13: “El amor durará para siempre”



Lo que voy a decir a continuación sorprenderá a muchos. Pero el amor no es un sentimiento. El amor es un verbo, yo amo, tú amas, él ama, no es un sentimiento. Los sentimientos son cosas como por ejemplo sentirse culpable, eso es un sentimiento. Sentir rabia, usted no puede conjugar la palabra rabia, yo rabio, tú rabias, es un sentimiento. Envidia, el temor, usted siente temor, usted se siente alegre, usted se siente triste. Ahora usted se puede sentir enamorado. O usted puede sentir que se puede sentir amado. Pero el amor no es un sentimiento sino que es una acción. Es una decisión que usted toma. Es un compromiso que usted hace. El amor es un verbo. Y ese amor nunca se acaba. El amor como sentimiento si se acaba, pero el amor como acción nunca se acaba.

Y para eso tenemos que entender lo que significa la palabra amor. Y cuando se escribió la biblia el idioma que se hablaba era el griego, por eso la biblia, el nuevo testamento, fue escrito en griego. Y en ese momento se usaban cuatro palabras para hablar del amor. Y la primera es “eros”.

Ahora cuando hablamos de eros muchos lo ven como algo malo, pero no, eros es un amor que Dios nos dio. No tiene que ver con lo erótico sino con lo romántico. Eros es romance. Y eros tiene que ver ahí si con sentirse enamorado, o sentirse amado. Y aunque esta palabra en el griego no la encontramos en la biblia, bien vemos un cuadro del amor eros en el libro “Cantar de los cantares”, en donde se nos habla de la relación de Salomón y su amada. Ahora eros es un amor físico, es de química, hay química entre él y yo. Es un amor emocional, “estoy enamorada”, y es un amor sensual. Porque Dios puso en nuestro cuerpo unos nervios que nos hacen sentir placer sexual y eso fue algo dado por Dios y eso es eros. No es malo. El problema es cuando eros está sólo, cuando no está protegido por las otras clases de amor.

La idea de eros es obtener un beneficio. Entonces “yo te amo porque me haces feliz”, tiene que ver con mi beneficio, “me siento bien cuando estoy contigo”. Nos produce placer, eso es eros. Es un beneficio personal. Y el fundamento del amor eros son los atributos de la otra persona que nos complacen a nosotros. Atributos como su belleza, “ese lunar que tienes cielito lindo junto a tu boca”, casi todas las canciones tienen que ver con atributos físicos. Y no hay nada de malo en eso. En “Cantar de los cantares” Salomón le habla a su amada acerca de su aspecto físico y eso es bueno. Tiene que ver con el “encanto” que tiene la otra persona. Su ternura “es un divino”, su amabilidad, sus detalles, sus palabras, su fama o su dinero. Y como dijimos antes, no hay nada de malo en eso. El problema es cuando ese atributo, o esos atributos, que nos conquistó desaparece. Se mandó a operar el lunar, se le acabo el dinero, el cuerpo ya no está tan en forma de guitarra como antes, ahora parece acordeón... Cuando eso sucede se acabó el eros. Y desafortunadamente muchos se casan basados en el amor eros y por eso se acabó el amor, se acabó el eros.

El otro amor es el amor “storge” y este es el amor de familia. Este es el afecto natural que yo siento, “claro que te amo, eres mi papa”, “claro que te amo, eres mi hijo y yo siento un amor natural hacia mi familia”. Y cuando nos casamos ese afecto natural empieza uno a sentirlo hacia la esposa.

Pero el otro amor que encontramos es el amor “fileo” y el amor fileo es el amor entre amigos. Fue esta la clase de amor que Pedro le pidió a Jesús, en Juan capítulo 21, cuando el Señor le dice: Pedro, ¿me amas? Y Pedro le dice: tú sabes que te amo. Y ahora el Señor le dice Pedro me, en griego le dice me agapeas, me amas con el amor “agape”. Y Pedro le responde: Señor tu sabes que te fileo. Lo que Pedro le está diciendo es “Señor tu sabes que soy tu amigo”. Él quería una amistad de amigo. Una amistad fileo. 

Ahora Jesús se relacionó con multitudes, pero sólo fue amigo (fileo) de unos pocos. Juan capítulo 15 verso 13, Jesús les dice a sus discípulos lo siguiente: nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos... Los está llamando a ellos amigos, sus fileos. Pero luego en el verso siguiente les dice: ustedes son mis amigos... Ustedes son mis amigos, pero también viene una condición: si hacen lo que yo les mando... Porque el amor de amigos es un amor condicional, es un amor de 50-50. “Mira, yo hago esto por ti, pero yo espero esto de parte tuya”. Entonces aquí el Señor les dice ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando, si cumplen con las condiciones. En el verso siguiente el Señor también les dice: ya no los llamaré siervos, sino amigos porque les he dado a conocer todo lo de mi Padre... A un amigo uno comienza a contarle todo. Quizás por eso muchos no tienen amigos, porque si usted quiere tener amigos usted tiene que dar hacia esa relación, usted tiene que servirlos. Y si usted es jefe de ellos no puede verlos abajo, ustedes tiene que empezar a verlos en el mismo nivel. Es un amor 50-50. Doy y espero recibir. Invierto en ti, pero espero que tú inviertas en mí. Y una relación de amigos puede durar toda la vida si el beneficio es mutuo, si los dos salen ganando. Pero si a una persona le toca estar siempre llamando, siempre estar pendiente, si una persona es la que da y da y la otra no, entonces esa amistad se termina.

Ahora en la amistad de amigos hay un poco de eros. Pero eso es bueno. Elegimos a nuestros amigos porque “nos gusta” estar con ellos, hay un beneficio en esto, “la pasamos bien”, experimentamos placer, aportan algo a nuestra vida. Entonces sí, hay un poquito de eros. Hay un poco de egoísmo podríamos decir. Pero aunque hay un poco de egoísmo, de beneficio personal, aun así es necesario pagar el precio para mantener esa relación 50-50. En Proverbios 8 verso 24 dice: El Hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo... Tiene que invertir en esa amistad. Podríamos decir que eros tiene que ver con “mi” felicidad, si eros está solo tiene que ver con mi felicidad. Pero fileo tiene que ver con “nuestra” felicidad, esa es la diferencia.

Ahora se dice por ahí que el amor es ciego, pero no es cierto. Eros es ciego, pero fileo no. Si usted es amigo de la persona con la cual planea casarse usted no está ciego, usted está analizando “tiene está familia terrible”... usted está analizando. Porque fileo no es ciego. Porque fileo da 50 pero espera 50. Por eso un matrimonio fundamentado en el amor fileo es más estable que uno fundamentado en el amor eros y por eso hay matrimonios que funcionan sin estar Dios ahí, porque son amigos. Es una relación de 50-50, pero los problemas empiezan cuando la balanza se empieza a inclinar más hacia un lado que el otro. Y esto sucede cuando vienen situaciones estresantes a la relación, quizás problemas financieros (el hombre pierde su trabajo), ahí comienza la tensión, porque se supone que “yo me case para que este individuo me mantenga”. Y de repente las cosas no le salieron bien. Y si está fundamentado en el amor fileo comienzan los problemas, “porque yo estoy haciendo mi parte, pero él no está haciendo su parte”. Cuando vienen enfermedades, cuando vienen diferencias en cómo vamos a educar a nuestros hijos, ahí empiezan los problemas. Ahí nos damos cuenta lo egoístas que realmente somos. Por eso el matrimonio no puede estar fundamentado sobre el amor fileo, es necesario llegar a un nivel superior de amor. Y ese es el amor “agape”, el amor de Dios, el amor incondicional.

Este es el amor que dice “yo te amo a pesar de tus debilidades, yo te amo a pesar de eso”, es seguir amando a una persona que no merece ser amado. A una persona que no ha hecho su parte dentro del pacto. “La voy a seguir amando”, eso es amor agape. El amor agape no busca su propio beneficio sino que se deleita en dar sin recibir nada a cambio, ese es el amor agape. Su mayor placer es hacer feliz a la otra persona, no da el 50 por ciento esperando recibir el 50 por ciento sino que da el 100 por ciento sin esperar nada a cambio. Muchos dirán “eso es humanamente imposible”, precisamente así es. Este amor es imposible, humanamente! Por eso necesitamos a Dios. Por eso un matrimonio donde Dios no está no funciona, se termina acabando. Si Dios no construye su casa en vano es todo su esfuerzo. Jesús dijo: “sin mí no podrás hacer nada”. Es imposible, hasta que uno no diga “con Cristo estoy juntamente crucificado y ahora no vivo yo, es Cristo quien vive en mi”, un matrimonio sin Dios es imposible... Cuando usted se aleja de Dios empieza a construir su amor sobre eros o sobre fileo, pero van a venir momentos de tensión y su matrimonio se va a acabar.

Por eso digo, ¿usted ya ha aplicado 1era de Corintios capítulo 13 a su mujer? Porque si usted no lo ha aplicado usted no está preparado para el matrimonio... Ahora, algunos en esta etapa de eros se sienten enamorados y por eso deciden formalizar su relación con algo que llaman matrimonio, y lo hacen. Algunos ya ni lo hacen. Algunos lo formalizan a ver si comienza a venir el afecto natural, a ver si hay más fuerza para el matrimonio. Pero no es así. Algunos matrimonios duran más que otros, porque después de eros trabajan en el fileo y logran tener una relación de amigos. Y son realmente buenos amigos y esto les da fortaleza, pero si no hay agape se va a terminar con el tiempo. 

Desafortunadamente muchos matrimonios han fracasado porque han seguido este orden. El orden del mundo, eros, el matrimonio, luego fileo, entonces vuelvo a preguntar: ¿El amor se acaba? Pues si es un matrimonio o una relación basada en el amor eros, el amor se acaba. O si estaba basado en el amor fileo, el amor se acaba. Pero si es el amor agape, el amor de Dios, este amor dice la biblia “permanece para siempre”. Por eso si en su matrimonio no hay amor agape, usted tiene que pedir que Dios se lo dé. Este es el amor que sólo recibe de parte de Dios. 

El amor agape, es un amor que da. Es un amor de sacrificio, es un amor que dice “vivo para ti, yo me sacrifico para ti”, ese es el amor agape. Es un amor que dice, “tu carga es mi carga, tu dolor es mi dolor”. Por eso en Juan 15 verso 13 Jesús dijo: El hijo del hombre vino a dar su vida... ¿O no hay un amor más grande del que vino a dar su vida por sus amigos? Y eso es el matrimonio. Es dar mi vida, es morir a todo por mi esposo/a. Sin ese amor nunca va a funcionar su matrimonio. Por eso también en Mateo 20 verso 28 dice: Jesús no vino para ser servido sino para servir... no es para mí beneficio, es para el beneficio del otro. Y eso sólo se puede hacer si usted se sacrifica por la otra persona. El amor agape también es un amor de sensibilidad, “yo soy sensible a tus necesidades, a tus sentimientos”, “yo te pongo atención, yo dejo a un lado todo lo que estoy haciendo para poner mi atención en ti”, es un amor de entrega. Es un amor que dice: “¿Cuáles son tus sueños, que puedo hacer para que tus sueños se realicen?”.

Veámoslo en 1era de Corintios 13, ahí nos habla del amor agape: 

En primer lugar el amor es paciente; eso quiere decir que se citaron a una hora y usted lleva 45 minutos esperándola y su novia no ha llegado y cuando llega usted le dice “oh que alegría”, en ningún momento pasó por su mente un mal pensamiento, un mal sentimiento, nada. Ella le dice “perdóname que me he retrasado” y uno le dice “no, si pasó como un segundo”, eso es agape. Es paciente. 
También dice, es sufrido. Sufre sin que se le note. 
También dice es bondadoso, es un amor bueno. Siempre hace el bien a la otra persona.
No es celoso. No le tiene celos a las otras personas, a su trabajo, a nada. No está exigiendo “¿y a mí que, no me vas a dar la atención?”.
Ni fanfarrón, ni orgulloso, ni ofensivo. No ofende con sus palabras, con sus miradas, con sus puños, no ofende.
No exige que las cosas se hagan a su manera, o no es egoísta. No dice “es como yo quiero, cuando yo quiero”, “es lo que a mí me gusta”, no exige eso. Esta dispuesto a que se haga las cosas como la otra persona quiere. 
No se irrita... Por eso dijimos, si usted no ha pasado la prueba de 1era de Corintios 13, usted no está listo para casarse. Porque en todas las relaciones van a suceder situaciones que vamos a… irritarnos. Pero cuando eso sucede uno debe reconocer que necesita el amor de Dios. Entonces cuando es así tenemos que ir a la 1era de Corintios 13 y pedirle a Dios que uno no quiere irritarse…
No lleva tampoco un registro de las ofensas recibidas… porque perdona.
No se alegra de las injusticias sino que se alegra cuando ve la verdad triunfar.
El amor nunca se da por vencido… nunca se cansa. Jamás piensa en la separación. Nunca se da por vencido.
Jamás pierde la fe… Sigue creyendo en el matrimonio. Sigue creyendo en la otra persona.
Siempre tiene esperanzas… siempre cree que mañana será un mejor día.
Y se mantiene firme en toda circunstancia… por eso dice: 
“El amor durará para siempre”.

Ahora también podemos ver este amor en Galatas 5 verso 22, donde nos habla del fruto del espíritu y dice que el fruto del espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio sobre sí mismo. Pero hay algunas personas que creen lo siguiente, como cuando se escribió el nuevo testamento no existían las comas ni los puntos, algunos dicen que los dos puntos no vienen antes del amor, sino después… y si eso es así lo que dice es “el fruto del espíritu es amor: el que ama es alegre o el amor es alegría, el amor es paz, el amor es paciente, el amor es amable, el amor es bueno, el amor es fidelidad, una persona que realmente ama es fiel, el amor o el que ama es humilde, tiene dominio sobre sí mismo… Es interesante ver eso. Porque recuerda que el Señor dijo que en una palabra se resume toda la biblia y esa palabra es el amor. El amor de Dios. 

Entonces, teniendo esto presente, ¿cuál es el orden de Dios para tener una relación? 

Todo se inicia con agape, pero una persona no puede amar realmente a su esposo/a o a sus hijos o a sus papas si no ha recibido el amor de Dios. Si usted no ha estado en los brazos de Dios, si usted no ha estado en el pecho de Dios, en el pecho de papa canguro, recibiendo su amor, oyendo sus palabras, oyendo su respiración, en la intimidad con Dios, así que lo primero es recibir el amor de Dios. Pero cuando usted ya recibió el amor agape de Dios, usted tiene que darlo a los demás y ojo, no se trata de amor a su esposo/a, se trata de amar a todos. Porque el que dice que ama a su esposo/a pero no ama a los demás, no ama realmente. Esa es la prueba del amor. 

El gran mandamiento es este: Amaras primero a Dios… y como esa persona ama a Dios así te amará a ti. Y lo segundo es amaras a tu prójimo... y si no ama a la gente no te amará a ti. Como trate a la gente así te tratará a ti. Esa es la prueba del amor agape. Y también dice: como a ti mismo… y si esa persona no se ama, si él se hace daño con los vicios, si no se cuida, si es inseguro, si no se ama no te amará a ti... 

Entonces espera a que pase por un proceso de sanidad.

El segundo paso en el amor de Dios es el fileo, antes de tener romance sean amigos y recuerden que Jesús se relacionó con todo el mundo, tuvo agape con todos pero su fileo fue con un grupo especial... entonces dentro de ese grupo de amigos, usted va a encontrar la persona que va a amar para toda su vida y después de esto sigue el compromiso, el pacto matrimonial que va a poner el amor storge, el afecto natural. Y ya cuando su relación está totalmente protegida por el amor agape y el amor fileo, en ese momento usted puede entregarse confiadamente al amor eros. Pero para eso necesitamos el amor de Dios. 

- Andres Corson

SAGRADO EMMANUEL I SELASSIE I JAH RASTAFARI